viernes, 22 de agosto de 2008

Irregular desveda

J.A. SARASKETA

El domingo encontrará el alba en las zonas tardías un sin fin de cazadores impacientes por empezar a cazar una especie emblemática, que exige conocimientos, sacrificio y el concurso de un perro práctico. Atrás quedó la desveda del día 15 en las zonas tempranas donde se está dando irregular. Pocas en proporción donde se esperaban muchas y algo mejor donde normalmente escasean. Una media, siempre baja, de 12 codornices por día en lo bueno y 3 en lo regular puede aproximarse a la realidad.


Como de costumbre no han faltado los comentarios de rigor: hacen falta buenos perros, hay que trabajarlas, están en los poyos y por zonas... Es el embrujo de esta pequeña migradora. Pero lo cierto es que esta ave, sensible donde las haya a la mínima incidencia en su hábitat (meteorología, pastoreo abusivo y agricultura agresiva) desbarata con sus desplazamientos en un solo día cualquier previsión anticipada. Por eso y mucho más nadie se cuestiona que su trabajo sea perjudicial para el devenir de la especie. Cazadores de todas las edades y vasta cultura cinegética respetuosos en el campo y exigentes en la conservación de los animales, motivo de su afición, garantizan su futuro. El que da todo lo que tiene no está obligado a más y el que dice que lo sabe, aunque muchas veces no llegue donde debiera, merece respeto. ¡Qué sabrán algunos 'pisahierbas' anticaza de las astucias y habilidades que requiere este arte! ¡Qué madrugones, esfuerzos, lances y vivencias! ¿Qué está en regresión la especie? No. El que está interviniendo en su comportamiento con una fuerza exultante es el hombre y los animales están pagando incluso con su vida las consecuencias de una agricultura agresiva donde únicamente prima la cosecha en detrimento de las especies. Prueben durante un par de años con una agricultura ecológica y sostenible y se sorprenderán de la explosión de vida silvestre que los campos son capaces de generar. Nunca he entendido la pasividad de los grupos ecologistas en este sentido. ¿Acaso les perjudica arremeter contra sus protectores? Está claro que vende esto de fustigar a los cazadores, aunque no dispongan de grupos de fácil acceso a los despachos políticos.
Fuente: El Correo

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