jueves, 31 de julio de 2008

LA HEGEMONIA DE LA SUPERPUESTA

A la hora de elegir una escopeta nueva son varios los factores que hay que tener en cuenta, primando la relación entre calidad y precio, la versatilidad y las preferencias de cada cazador.

De los tres principales tipos de escopetas; yuxtapuestas, semiautomáticas y superpuestas, es esta última quien se lleva el gato al agua a la hora de la compra, eso sí, tras una dura pugna con las semiautomáticas o repetidoras, quedando relegado a un muy segundo plano la tradicional escopeta paralela o yuxtapuesta, y donde nuestra armería tradicional eibarresa ha escrito y escribe aún hoy en día muchas páginas en mayúsculas.
Las razones para decantarse por superpuestas o repetidoras tiene bastante que ver con el proceso de fabricación, mucho más mecanizado e industrializado, más barato a la postre y con un precio final mucho más contenido respecto a las escopetas paralelas, que requieren de manos expertas para su terminación y ajustes, ambos muy finos.
En este campo, la modularidad de las piezas y su fabricación en serie otorga franca ventaja a la superpuesta; doble cañón, normalmente con choques intercambiables, con encare sobre una solista que permite ver más el radio de acción, y la más fácil disponibilidad de cañones de distintas larguras, le dan ventaja sobre sus competidoras.
REPETIDORA
La escopeta semiautomática le va a la zaga en el capítulo de ventas, y por tanto a la hora de ser elegida por elegida, con ventajas y también desventajas. Contar con un único cañón permite apuntar más rápido, pero ese cañón sólo dispone de un choque, con lo que habrá que calcular mejor el disparo o jugar con perdigones de distintos tamaños. Sin duda contar con un tercer disparo es la mayor ventaja, si además este modelo cae en buenas manos que sepan controlar los tiros. Pero la limitación del choque vuelve a la palestra, debiendo elegir muy bien la largura del cañón y el choque a usar según la modalidad de caza que se vaya a practicar.
Eso sí, la tecnología avanza para todas estas escopetas, con mejoras tanto en el cañón, como en los mecanismos e incluso en las maderas o polímeros que conforman culatas y delanteras. Nuevas cantoneras, algunas rellenas de gel, para aplacar la amortiguación del disparo, sistemas internos en la culata para reducir el retroceso o mejorar el equilibrio del arma, sistemas de inercia o gases en las repetidoras que quitan culatazos, y larguras de cañones entre 55 y 76, o hasta más de 80 para cazar acuáticas o disciplinas de tiro, son relativamente fáciles de conseguir en los nuevos modelos.

VENDER
Pero no se fíen demasiado de los profetas de algunos medios de comunicación cinegéticos, en especial de los que hablan abiertamente mal de las yuxtapuestas "porque no han evolucionado", "su retroceso desencara mucho" y argumentos similares, discutibles. Menos aún si estos mesías siempre salen con ropajes y armas de una marca de renombre mundial, en concreto italiana, y gastan en las fotos, propias, por supuesto, modelos de superpuestas que pasan de seis mil euros.

Si desean y pueden gastarse ese dinero en una excelente escopeta paralela propia, a medida, aún quedan en Eibar y alrededores firmas como Aya, Arrieta, Grulla, Garbi, Kemen, Ugartetxea o Arrizabalaga donde le harán su escopeta. Eso sí, sin pretender llegar a las olimpiadas ni a los campeonatos estatales o internacionales, pero sí con el fin de disfrutar de su escopeta, que no es poco para un cazador de a pie. El resto son manías y modas. Y sin desmerecer a las grandes con nombre propio para las Browning, Remington, Beretta, Benelli, Fabarm, Breda… en Euskadi también se tienen estupendas escopetas de casas como Lanber, Laurona, Aguirre… Sin desmerecer a las grandes escopetas con nombre propio, en la CAV hay excelentes escopetas .
J.ATXA

Fuente: DEIA

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