El mayor órgano de representación legal de los cazadores vizcainos está inmerso en competiciones de perros, pruebas de recorridos, tiro con arco o el examen.
La Federación Territorial de Caza de Bizkaia no descansa en estas fechas en las que se desarrollan varias de las diversas competiciones de las que es responsable así como en diferentes gestiones que afectan a la representatividad de los cazadores vizcainos. Además, esta federación está de enhorabuena ya que la Orden Foral 1875/2013 le reconoce como entidad colaboradora en materia de caza, lo que sin duda abrirá las puertas a nuevas colaboraciones con el ente foral, el encargado de legislar en materia cinegética en el territorio. Una buena noticia esperada desde hace tiempo para todos los cazadores vizcainos y para las distintas sociedades de caza, que en breve podría dar sus frutos.
Pero volviendo al día a día federativo, en las últimas semanas se han culminado las pruebas de rastro de jabalí, las de compak sporting o recorridos en cancha, las de silvestrismo con el campeonato celebrado en Leioa, el San Huberto disputado en Ereño, o las tiradas de recorridos, donde falta de realizar la última de las tres puntuables previstas. También este próximo sábado se realizará el examen del cazador en su primera convocatoria, al que acuden diversos representantes federativos. Asimismo, los deportistas de caza con arco tendrán el XV Campeonato de Bizkaia de recorridos de caza con arco este domingo en el polígono de Torrelarragoiti, en Zamudio, en dos categorías: arco compuesto por una parte, y arco tradicional y Long Bow por otra.
Por supuesto, para participar en estas pruebas deportivas resulta requisito imprescindible contar con la tarjeta federativa en vigor. Un documento que avala la pertenencia a la Federación de Caza de Bizkaia y que debieran de portar todos los cazadores de este territorio en su bolsillo a sabiendas de que se trata del único papel que les permite saberse representado en todas las instancias oficiales. Porque si de algo carece Bizkaia es de respaldo a su federación de caza. En un territorio con más de treinta mil dueños de escopetas y bastante más de veinte mil cazadores, son muchos los que no sacan licencia en Euskadi por la dependencia de las aves migradoras pero sí acuden a cazar a otras autonomías; y son poco más de dos mil quinientos cazadores lo que tienen la tarjeta federativa.
Esa es la representación que ostentan nuestros responsables cuando acuden a un Consejo de Caza territorial, por ejemplo, o a las elecciones de nuestros representantes a nivel autonómico. Poco que ver con los catorce mil federados que tienen nuestros vecinos guipuzcoanos, y que hacen que toda la caza de esa provincia pase por sus manos casi obligatoriamente. En Araba, con muchos menos cazadores, también superan las dos mil tarjetas federativas, así que Bizkaia se queda a la cola en respaldo proporcional a este ente.
Una situación compleja de resolver porque el poco apoyo entre el colectivo impide a la federación obtener más y mejores cotas de funcionamiento y, por la otra parte, también algunos cazadores de a pie se preguntan en qué les redunda el gastarse más euros para una tarjeta que ofrece contadas alternativas reales. Los jóvenes de Adecap Gazteak están impulsado una nueva campaña para animar a todos los cazadores a que se federen ya que "solo siendo un colectivo unido" se puede alcanzar "la fuerza necesaria para alcanzar las reivindicaciones pendientes", que no son pocas.
Estos jóvenes también solicitan afiliarse a Adecap, asociación con más de veinte años de trabajo altruista a favor de la caza y los derechos de los cazadores con importantes logros en su haber. Una llamada seria a la mayoría de los cazadores de a pie, para que olviden el tradicional individualismo que nos caracteriza en aras a poder obtener un futuro mejor y de mayores posibilidades cinegéticas en Bizkaia y en Euskadi. Y es que con veinte mil federados en Bizkaia, la situación sería bien distinta.
J.ATXA
DEIA
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